La compañía china DeepSeek ha entrado con fuerza en el escenario de la inteligencia artificial (IA) con innovaciones que están transformando las dinámicas del sector en todo el mundo. Su modelo lingüístico R1 ha mostrado habilidades que rivalizan con las de los principales actores del mercado, pero con una eficiencia en gastos y uso de energía nunca antes vista. Este desarrollo ha causado un impacto notable en los mercados financieros y ha suscitado nuevas preguntas sobre el futuro de la IA.
A diferencia de otros modelos que requieren grandes infraestructuras y una considerable inversión en recursos de cómputo, DeepSeek ha conseguido optimizar el entrenamiento de su IA. Utilizando alrededor de 2,000 GPU, en comparación con las 16,000 que usan otras firmas, la empresa ha disminuido tanto los costos como el impacto ambiental de sus actividades. Esta eficiencia no solo democratiza el desarrollo de la IA, permitiendo que compañías más pequeñas se involucren en el mercado, sino que también pone en duda la necesidad de inversiones enormes en infraestructura para alcanzar avances relevantes en este ámbito.
A diferencia de otros modelos que requieren infraestructuras de gran escala y una inversión considerable en recursos computacionales, DeepSeek ha logrado optimizar el proceso de entrenamiento de su IA. Utilizando aproximadamente 2,000 unidades de procesamiento gráfico (GPUs), en contraste con las 16,000 que emplean otras empresas, la compañía ha reducido tanto los costos como la huella ambiental de sus operaciones. Esta eficiencia no solo democratiza el desarrollo de la IA, permitiendo que empresas más pequeñas participen en el mercado, sino que también cuestiona la necesidad de inversiones masivas en infraestructura para lograr avances significativos en el campo.
Este avance también ha resaltado la concentración del mercado en manos de unas pocas grandes tecnológicas, conocidas como las «Siete Magníficas», que lideran el índice S&P 500. La aparición de DeepSeek enfatiza la importancia de diversificar y estimular la competencia en el sector de la IA, promoviendo un entorno más equilibrado y menos dominado por grandes corporaciones.
Desde un punto de vista de inversión, la llegada de DeepSeek subraya la importancia de analizar los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) y de tener en cuenta factores geopolíticos en las estrategias de inversión. La habilidad de DeepSeek para crear modelos de IA de alta calidad con recursos reducidos indica que las empresas deben reconsiderar sus tácticas y ajustarse a un panorama tecnológico en rápida transformación.
Desde una perspectiva de inversión, la aparición de DeepSeek resalta la importancia de evaluar los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) y de considerar factores geopolíticos en las estrategias de inversión. La capacidad de DeepSeek para desarrollar modelos de IA de alta calidad con recursos limitados sugiere que las empresas deben reevaluar sus enfoques y adaptarse a un panorama tecnológico en rápida evolución.
A pesar de los progresos de DeepSeek, líderes del sector, como Robin Li, CEO de Baidu, destacan la necesidad de seguir apostando por la infraestructura en la nube y los centros de datos para crear modelos de IA avanzados. Li aprecia la innovación de DeepSeek, pero subraya que el poder computacional aún es crucial para producir modelos de IA competitivos. Además, sugiere que el desarrollo de modelos de código abierto podría impulsar la adopción de la tecnología al fomentar el interés y la participación del público.
Analistas del sector, como Pierre Ferragu de New Street, tienen una visión positiva sobre el impacto de DeepSeek en la industria de la IA. Ferragu resalta que la optimización y la conformidad de DeepSeek con las leyes de escalamiento están alineadas con las tendencias del sector. Indica que la disminución de costos en la computación de IA y en los servicios de modelos de IA fomentará la adopción y el gasto en IA, reflejando tendencias vistas en la industria de los chips. Además, menciona que las grandes empresas tecnológicas han aumentado considerablemente sus previsiones de inversión de capital para 2025, lo que sugiere un crecimiento en las inversiones en infraestructura de IA.
Analistas del sector, como Pierre Ferragu de New Street, mantienen una perspectiva optimista sobre el impacto de DeepSeek en la industria de la IA. Ferragu destaca que la optimización y adherencia de DeepSeek a las leyes de escalamiento están en línea con las tendencias de la industria. Señala que la reducción de costos en la computación de IA y en los costos de servicio de modelos de IA impulsará la adopción y el gasto en IA, reflejando tendencias observadas en la industria de chips. Además, menciona que las principales empresas tecnológicas han incrementado significativamente sus previsiones de gasto de capital para 2025, lo que indica una aceleración en las inversiones en infraestructura de IA.
Empresas chinas de diversos sectores ya están integrando el modelo de IA de DeepSeek en sus productos y servicios. Por ejemplo, Great Wall Motor ha incorporado DeepSeek en su sistema de vehículos conectados, denominado «Coffee Intelligence». Asimismo, los principales proveedores de telecomunicaciones de China, como China Mobile, China Unicom y China Telecom, están trabajando en la implementación de la tecnología de DeepSeek en sus operaciones. Este interés ha generado un aumento en el valor de las acciones de empresas relacionadas con la IA en China, aunque algunas de ellas han advertido a los inversores sobre la incertidumbre de sus perspectivas comerciales.
En el ámbito internacional, figuras como Lord Vallance de Balham, ministro de ciencia del Reino Unido, han señalado que el desarrollo de la IA por parte de DeepSeek será beneficioso para su país. Destaca que la competencia generada por innovaciones como las de DeepSeek fomenta la aparición de nuevas empresas y una mayor innovación en el sector. Sin embargo, también enfatiza la necesidad de un desarrollo responsable y ético de la IA, subrayando la importancia de instituciones como el Instituto de Seguridad de IA del Reino Unido para evaluar los sistemas más avanzados.